El comité del sarcasmo

El pasado lunes al fin encontré tiempo para ver una comedia que llevaba meses intentando ver: In The Loop. Se trata de una película británica, muy al estilo de The Office, que fue nominada al Oscar a mejor guión adaptado. Su director, Armando Iannucci, debuta en la gran pantalla con este largometraje, y el reparto encuentra en James Gandolfini (Los Soprano) a su cara más conocida.

Puede que no sea una película para la historia, pero sí que es entretenida y divertida. Se trata de la típica comedia negra donde la ironía y el sarcasmo inglés cobran especial protagonismo con gran audacia. Y la sátira sobre el mundo político no se queda atrás. Todos estos ingredientes le han llevado a ser una de las comedias más brillantes de 2009; eso sí, que nadie espere el típico humor sencillo y previsible de las comedias americanas, ya que su gracia radica en gran medida en los diálogos.


(Título: In The Loop; Director: Armando Iannucci; Reparto: Peter Capaldi, Tom Hollander, Gina McKee, James Gandolfini, Steve Coogan, Chris Addison y Anna Chlumsky; Género: Comedia; Premios: Mejor guión de 2010 para el Círculo de Críticos de Nueva York y nominada a un Oscar a mejor guión adaptado; Valoración: 7,5)

Películas comentadas en el blog antiguo

¿Nacionalismo o demagogia de mierda?

En una de mis numerosas excursiones por el Facebook me encontré con una perla que bien merece ser criticada es este blog. Se trata de un artículo de un tal Salvador Sostres que lleva como título la siguiente pregunta: ¿Español o catalán de mierda? Me niego a poner el artículo entero aquí, ya que se corre el riesgo de que más de uno le dé un puñetazo a la pantalla de su ordenador (pongo el enlace por si hay algún valiente), así que iré fragmentándolo para comentar poco a poco todas las estupideces que puede llegar a decir este señor, que asegura que escribir es meterse en problemas. Toda una declaración de intenciones de aquél que utiliza el fútbol y la demagogia para soltar una barbaridad tras otra y quedarse tan tranquilo.

“Tiene sentido que yo, como independentista, me alegre de las derrotas del Madrid y de la selección española”.

Supongo que también se alegrará de las derrotas del Zaragoza, del Racing, del Atlético, del Valladolid y de cualquier otro equipo español, pero parece ser que todos los españoles somos del Madrid. Yo, a pesar de ser español, también me alegro de los triunfos del Liverpool o del Milán, equipos a los que les tengo una gran simpatía. Pero si soy español, ¿cómo es posible? Sencillamente porque yo no soy de un equipo u otro por cuestiones políticas y porque el fútbol es más universal que los pensamientos nacionalistas de este demagogo.

“Pero cuando mañana juegue el Barça contra el Inter, toda esta tropa de recalcitrantes españolistas, o de españoles simplemente, forofos del Madrid, ¿van a inclinarse por el odio al Barça o van a agarrarse a la Constitución a la que se aferran para prohibir referendos democráticos y van a desear que gane 'un equipo español'? Los que tenemos claro que el Barça es el ejército de Cataluña, no vivimos contradicciones de este tipo”.

Esperad un momento a que me frote los ojos, ya que este párrafo es para enmarcarlo y metérselo por donde le quepa. En primer lugar, ¿a qué viene el calificativo de recalcitrante? ¿Acaso no lo es más aquél que se inventa la historia para justificar que el Reino de Aragón era realmente el Reino de Cataluña? ¿Qué tienen que ver los referendos democráticos y la Constitución con los sentimientos futbolísticos? Y aquél que sólo ama al Barça por ser el Barça, incluso sin ser catalán, ¿estará de acuerdo con que este club pase de ser simplemente un equipo de fútbol, baloncesto o balonmano a ser el ejército de Cataluña? ¿Qué opinarán los catalanes del Espanyol, Girona, Nàstic o Lleida?

“Y como dice el presidente Laporta, el Barça más catalanista de todos los tiempos es el más universal de toda su historia y el que más éxitos jamás haya cosechado. Al contrario de lo que tantas veces se ha querido hacer creer, el nacionalismo no limita con la universalidad ni las raíces con las alas”.

Ojo que se crece y se vuelve poeta: “El nacionalismo no limita con la universalidad ni las raíces con las alas”. Que gran prosa. Parece que lo haya escrito Cervantes, aunque todos sabemos que Cervantes era español e igual a este ser no le agrada la comparación. En cuanto al Barça más catalanista de todos los tiempos… Iniesta es de Albacete, Messi es argentino, Alves es brasileño, Piqué tuvo que emigrar al Manchester para buscarse la vida y Xavi, Busquets y Puyol defienden a muerte la camiseta de España. Eso sí, reconozco que Laporta es el presidente más catanalista de toda la historia del Barça.

“Pero ¿qué van a hacer los de la España 'antes roja que rota'?”.

Este enunciado merece una pequeña lección de ortografía: las frases en interrogación empiezan en mayúscula salvo que vayan precedidas de una coma. Yo ni veo la coma ni la mayúscula, pero es algo que se le puede perdonar a aquél que aparenta hablar y escribir en catalán a todas horas. O espera, que en catalán no cambia esta regla lingüística. Entonces, habrá que darle un tirón de orejas: ¿El señor lo prefiere a la española o a la catalana?

“Qué van a hacer los autoproclamados 'no nacionalistas' pero que tienen sangre rojigualda y son capaces de cualquier barbaridad para proteger la indisoluble unidad de la patria. ¿Qué prefieren? Que según su lógica gane un equipo español, que según la nuestra es un equipo que encarna la épica de la libertad de los pueblos; o bien prefieren dejarse de milongas, ser de una vez sinceros, y reconocer que sienten el mismo rechazo por el Barça y por lo que el Barça representa que muchos catalanes sentimos por el Madrid y por lo que el Madrid representa? El Barça, en el corazón de los madridistas en particular y de los españoles en general, ¿va a ser mañana un equipo español o catalán de mierda?”.

¿A qué barbaridades se refiere este bárbaro de la sintaxis? Por cierto, ahora me entero de que el Barça encarna la épica de la libertad de los pueblos. Si lo llego a saber antes, creo un grupo en el Facebook pidiendo el Nobel de la Paz para este gran club. Desde luego, este señor está haciendo méritos para que lo nombren nacionalista del año por delante de Laporta. ¿Acaso eso no es ir en contra de su presidente? Me da que a este individuo no le vuelven a dejar entrar en el Camp Nou de por vida.

Y ya que lo pide, voy a ser sincero: deseo enormemente que el Inter elimine al Barça, pero no por lo que representa el Barça (por lo que intenta que represente Laporta, sí), ya que yo conozco a más de uno que tiene la sangre rojigualda y el corazón azulgrana, sino por el hecho de que además de zaragocista me considero algo madridista. Al igual que un culé está en su derecho de desear que al Madrid lo eliminen a las primeras de cambio, un merengue está en su derecho de desear que el Inter elimine al Barça. No es política ni simbolismo ni representaciones. Es, ante todo, fútbol. Y ya que este señor le hace una pregunta a los españoles, que aunque él no lo quiera también lo es, yo le hago la siguiente a él como independentista que es: ¿Es nacionalismo o demagogia de mierda?

“¿Qué va a primar, el fútbol o la política? ¿Por qué el Barça cae tan mal en Madrid y en cambio el Español -también de Barcelona- cae tan simpático? ¿Por fútbol o por política? ¿Por qué cuando el Barça va a jugar en el Bernabéu los hinchas del Madrid creen que animan sólo a su equipo con banderas españolas?”.

He aquí los mayores enigmas de la humanidad, que por suerte tienen respuesta, sin antes aclararle a este señor que es Espanyol, no Español. La política la han introducido en el fútbol gente tan extremista como el señor Laporta y el autor de este artículo, personas que necesitan aprovecharse de un deporte tan mediático como el fútbol para lanzar un mensaje que a la mayoría de los habitantes del planeta nos importa una mierda. El Espanyol cae simpático al aficionado del Madrid, no en Madrid, al igual que el Atlético cae simpático al aficionado del Barcelona, no en Barcelona. Y por último, artículos como el de este señor, las pancartas ‘Catalonia is not Spain’ o el hecho de que se silbe al himno español en una final de Copa, ¿no son motivos suficientes como para pensar que una bandera de España le fastidia tanto a ese club llamado Barça como a un servidor que vengan sus hinchas a La Romareda a blasfemar contra la Vírgen del Pilar?

“Todo el mundo mezcla fútbol y política. De hecho, pocas cosas hay tan políticas como el fútbol. El miércoles, el Barça se la juega con el Inter. El Barça que, entre otras muchas cosas, es la columna vertebral de la selección española. Y bien, la mayor parte de los españoles, a diferencia de si jugara cualquier otro equipo de la Liga, querrán que gane el Ínter. Esta mayoría de españoles que serán los primeros en desmentir la idea de la España una”.

Y yo que soy del Zaragoza, ¿cuál es mi ideología política? Es cierto que en el fútbol existe la política y las connotaciones políticas, pero el único presidente que se aprovecha del fútbol para un fin político es Laporta. Y anda que no le debe joder a este señor que los Piqué, Puyol, Busquets, Xavi e Iniesta sean la columna vertebral de España y no de Cataluña. Y ya que estoy, un aviso para navegantes nacionalistas: si tanto odiáis a España, no sé a qué viene tanto luchar para ser campeón de una nación, ya sea de Liga o de Copa, a la que decís no pertenecer.

Yo, si el Barça gana la Champions, me alegraré por esos jugadores como españoles que son y por todos mis amigos culés, al igual que me alegraré por mis amigos colchoneros y aquellos futbolistas españoles del Atlético si este equipo gana la Europa League. Otra cosa es que yo quiera que el Atlético elimine al Liverpool. Y a pesar de toda esta lección de demagogia, que no le quede ninguna duda a este señor, le guste o no, que Cataluña pertenece a España y que artículos como éste lo único que hacen es unirla más, relacionar al Barça con el nacionalismo e incrementar el odio por el club azulgrana y los catalanes, sean independentistas o no. Flaco favor les hace a sus conciudadanos.

“¿Alguien cree, de verdad que aún alguien cree que si el Barça ganara la Champions en el Bernabéu se trataría únicamente de una victoria deportiva?”.

Todos sabemos que si el Barça gana la Champions en el Bernabéu, Laporta será inmediatamente proclamado presidente de la República Independiente de Cataluña.

¿El último gol de Raúl como madridista?

En más de una ocasión he tenido discusiones con Raúl como protagonista. Yo siempre lo he defendido y lo defenderé, pero al mismo tiempo sé que hay amigos que siempre lo han criticado y lo criticarán. Ellos dicen que es un jugador sobrevalorado, carente de calidad y que todos sus goles tienen un denominador común: sólo tiene que empujarla a puerta vacía.

Yo, por otra parte, defiendo su profesionalidad, su compromiso y también sus virtudes como futbolista, ya que aunque algunos se nieguen a verlas, las tiene. Si no, es imposible mantenerse en el Madrid tantos años como titular, por mucho que digan que la prensa está a su favor. También intentaron encumbrar a Portillo y se demostró que al final el fútbol pone a cada uno en su sitio.

Reconozco que Raúl empezó a bajar su nivel a partir de 2003 y que ahora tiene que ser suplente sí o sí (su comportamiento está siendo ejemplar), pero no consentiré que digan que todos sus goles han sido desde la línea de gol. Por ello siempre amenazo a mis amigos con ponerles todos los goles del que tuvo que ser Balón de Oro en 2001. Es la mejor manera de demostrar que el siete también ha firmado varias obras de arte.

Y como poner todos los goles me parece excesivo para un blog, teniendo en cuenta que ha logrado 323 entre todas las competiciones, simplemente dejo aquí tres vídeos: el de su primer tanto con el Madrid, una selección de sus mejores goles (recuerdo alguno más que merecería estar ahí también) y el que podría ser su último como jugador blanco.



Corazón blanco

Hoy se enfrentan entre sí mis dos equipos, el Real Zaragoza y el Real Madrid, que curiosamente utilizan el blanco como primera equipación. No voy a esconder que soy más zaragocista que merengón, por lo que hoy deseo que gane el conjunto aragonés, pero nada me gustaría más que los blancos ganaran la Liga y que los blanquillos lograran la permanencia.

Puede parecer una casualidad, pero mi primer recuerdo futbolístico a nivel de clubes (el primero de todos es el oro olímpico de Barcelona 92) data de 1993, cuando el Madrid ganó su último título de Copa, precisamente ante el Zaragoza. Desde entonces he vivido numerosos partidos de Liga, goleadas históricas, el debut de Raúl, quien casi siempre fue protagonista en estos encuentros, eliminatorias coperas, el galacticazo y hasta una final de la Supercopa. Mucho fútbol y muchos recuerdos entre los que han sido, son y serán mis dos equipos del alma.

El repaso a todos estos encuentros comienza, como bien he dicho, en la final de Copa del 93 en Mestalla. El principal protagonista del encuentro fue Urío Velázquez, que se tragó un claro penalti a Gay, hoy entrenador del Zaragoza, a los ocho minutos de juego. Poco después Butragueño hizo el 1-0 y, lejos de derrumbarse, los aragoneses se fueron a por el empate. Moisés lo tuvo en su cabeza, en una de las imágenes que han quedado grabadas en mi memoria para siempre, pero la tiró por encima del larguero y Lasa se encargó de sentenciar el choque.



Ya en la campaña siguiente, el Zaragoza se volvió a encontrar con un polémico arbitraje en el Bernabéu, esta vez a cargo de Rubio Valdivieso. Higuera adelantó a los aragoneses, pero Butragueño y Míchel en dos ocasiones, ambas de penalti, le dieron la vuelta al marcador. Ya en el último minuto, Higuera puso el 3-2 definitivo con un auténtico golazo gracias a una vaselina sin ángulo.



El partido de la segunda vuelta cerraba la temporada 1993-94. En juego estaba el tercer puesto que defendía el Real Madrid y que finalmente fue para el Zaragoza, un Zaragoza que jugaba como los ángeles, que se había proclamado campeón de Copa y que ya había goleado 6-3 al Barça en La Romareda y 0-4 al Atlético en el Calderón, completando una segunda vuelta de ensueño. Míchel adelantó al Madrid de penalti, pero el torbellino aragonés aguardaba tras el descanso: Moisés empató el encuentro, Aguado le dio la vuelta al marcador, Higuera sentenció el choque y Poyet puso la puntilla. Una nueva goleada a un grande para poner la guinda a una de las mejores temporadas del Real Zaragoza en toda su historia.



En la campaña 94-95 el Zaragoza y el Madrid se disputaron el liderato en la novena jornada en La Romareda, en uno de los mejores ambientes que yo recuerdo, pero lo que realmente pasará a la historia de ese partido fue el debut de Raúl, un chaval de 17 años que a pesar de fallar tres ocasiones de gol ante Cedrún, dejó la sensación de que ahí había una futura estrella. Esnáider puso el 2-0 en el marcador con dos goles, pero Zamorano y Amavisca empataron el encuentro. Ya en los últimos instantes, Poyet le dio el liderato a su equipo con un disparo desde la frontal del área.




En la segunda vuelta el Madrid afianzó su candidatura al título de Liga tras una contundente victoria sobre el Zaragoza por 3-0 (Raúl, Zamorano y Duvosky). Finalmente, los de Valdano acabaron con la hegemonía de cuatro años del Barça y los de Víctor Fernández se alzaron con el mayor título de su historia: la Recopa de Europa.

Los partidos de las dos siguientes temporadas no tuvieron una gran relevancia. En la 95-96 los aragoneses lograron empatar en el Bernabéu a dos goles (Zamorano, Amavisca, Morientes y Rambert), pero el Madrid se llevó la victoria de La Romareda con un solitario gol de Hierro desde los once metros. En la campaña siguiente, el conjunto blanco ganó 1-2 en Zaragoza (dos de Suker y uno de Poyet) y 2-0 en el Bernabéu, ambos de Hierro.

En la temporada 97-98, el partido en La Romareda acabó con empate a dos (Raúl, Guti, Sondgren y Acuña), mientras que en la segunda vuelta el Zaragoza lograba la segunda victoria de su historia en el Bernabéu. Fue por 0-2, con goles de Jamelli, de penalti, y Gustavo López.



Una campaña después el estadio zaragocista vivió una sobredosis de goles. El resultado final fue de 3-4 y de todos ellos destacó el de Raúl, que superó a Juanmi con una gran cuchara. El resto fueron obra de Milosevic, Gustavo López, Kily González, Hierro, Roberto Carlos y Mijatovic. En la segunda vuelta el Madrid ganó 3-2con dos goles de Raúl y uno de Morientes, que dejaron en nada el doblete del Kily.

En la temporada 99-00 se pudieron presenciar cuatro enfrentamientos entre estos dos equipos. En los octavos de final de la Copa, el Madrid eliminó a los aragoneses tras el 0-0 de la ida y el 2-0 de la vuelta (Guti y Ognjenovic), pero en la Liga el Zaragoza humilló a los blancos en el Bernabéu con un histórico 1-5. Milosevic (2), Juanele (2) y Garitano sentenciaron a Bizarri, mientras que Raúl logró el gol del honor de su equipo.



En la segunda vuelta el Zaragoza se encontraba en plena lucha por el título de Liga, pero el Madrid frenó sus aspiraciones gracias a un piscinazo de Anelka que Mejuto González llevó al punto de penalti. Raúl firmó de esta forma el 0-1, logrando su gol número cien en Primera. Finalmente, los aragoneses llegaron a la última jornada con opciones de ganar la Liga por primera vez en su historia, pero no fue así y se tuvieron que contentar con la cuarta plaza. Puede que sin ese error arbitral de Mejuto y otro similar en la anterior jornada frente al Valladolid, el palmarés de los aragoneses contara con un título más.



En la campaña 00-01 el Real Madrid se impuso por 3-0 (Salgado, Raúl y Roberto Carlos) en el Bernabéu y por 2-3 (Juanele, Jamelli, Raúl [2] y Savio) en La Romareda. A la temporada siguiente el Madrid le ganó la Supercopa a los blanquillos tras el 1-1 de la ida (Yordi y Flavio) y el 3-0 de la vuelta, con hat-trick de Raúl. Ya en Liga, el Zaragoza se impuso por 2-1 en la capital aragonesa con una gran volea de Acuña en el último minuto. Los otros dos goles los marcaron Yordi y Raúl. En la segunda vuelta Hierro firmó un hat-trick para hacer inútil el gol de Milosevic, que no pudo impedir que los aragoneses bajaran a Segunda.



En su regreso a Primera, en la temporada 2003-04, La Romareda presenció un 0-0 y el Bernabéu un 1-1, con goles de Portillo y Toledo, dos días después del 11-M y cuatro días antes de la final de Copa entre estos dos equipos. Montjuïc fue el escenario del galacticazo. El Real Madrid llegaba como el gran favorito con su colección de estrellas, pero el Zaragoza realizó su mejor partido de la temporada, con un Gabi Milito espectacular, posiblemente más motivado de lo normal tras cancelarse su fichaje por el club blanco el verano anterior. Beckham hizo el 1-0 con un gran lanzamiento de falta, pero Dani y Villa, de penalti, le dieron la vuelta al marcador. Roberto Carlos empató ya en la segunda parte con otro lanzamiento de falta y el partido llegó a la prórroga. Fue ahí cuando Galletti entraría en la historia del Real Zaragoza tras lograr el gol de la victoria.




En la temporada 2004-05 los goles de Raúl, Ronaldo y Owen neutralizaron el logrado por Villa, mientras que en La Romareda, Óscar nada pudo hacer ante Owen, Roberto Carlos y Ronaldo. Un año más tarde, Roberto Carlos le dio la victoria al Madrid en el Bernabéu y Diego Milito y Ronaldo firmaron las tablas en La Romareda.

Pero lo que más se recuerda de aquella temporada fue el 6-1 que le endosó el Zaragoza al Madrid en el partido de ida de las semifinales de Copa. Cuatro goles de Diego Milito y dos de Ewerthon dejaron en una anécdota el gol de Baptista. Para la vuelta el Madrid recurrió al espíritu de Juanito y casi le da la vuelta a la eliminatoria. Cicinho, Robinho, Ronaldo y Roberto Carlos dejaron el marcador en 4-0 y el Zaragoza, guiado por un gran Cani, se convertía en el primer equipo que lograba eliminar en la misma edición de la Copa al Atlético, Barcelona y Real Madrid.




Ya en la temporada 06-07, Van Nistelrooy le dio la victoria a los blancos en el Bernabéu, mientras que en La Romareda se vivió uno de los minutos más locos de la historia de la Liga. El Zaragoza luchaba por entrar en Europa; el Madrid hacía lo propio por el título. Diego Milito se había encargado de adelantar a los suyos en dos ocasiones, pero Van Nistelrooy se negaba a dejar escapar esa Liga. Suyo fue el empate a uno y cuando parecía que el Barça, que ganaba 2-1 al Espanyol, iba a dejar sentenciado el título, el holandés volvió a poner las tablas en el marcador. Justo unos segundos después Tamudo llevaba el delirio a los seguidores del Madrid. Una jornada después los aragoneses entraron en Europa y los de Capello se proclamaron campeones.



A la campaña siguiente, Van Nistelrooy y Robinho le dieron el triunfo al Madrid en el Bernabéu y ya en La Romareda se vivió uno de los encuentros más raros que recuerdo (que cada uno lo interprete como quiera). El conjunto blanco llegaba al estadio zaragocista como campeón de Liga y tras golear al Barça, mientras que el Zaragoza intentaba escapar del descenso. Digamos que el Madrid no se tomó muy en serio el encuentro, pero a pesar de ello, los aragoneses se vieron incapaces de ganar. Ni adelantándose en el marcador por medio de Oliveira ni con una clarísima ocasión de Óscar en el último minuto de un encuentro que acabó 2-2 (Van Nistelrooy, Robinho y Sergio). El Zaragoza descendió una jornada después en Mallorca.



Y ya para terminar, esta temporada el Madrid logró en diciembre la mayor goleada de la Liga frente al Zaragoza por 6-0, con goles de Higuaín (2), Van der Vaart (2), Cristiano Ronaldo y Benzema. Fue en el debut de Gay como entrenador, pero desde entonces el equipo aragonés ha mejorado en juego, resultados y hombres. La permanencia y el título están en juego. Ojalá se den las dos cosas.

El Día de San Jorge, no el de Sant Jordi

Hoy es el Día Internacional del Libro y al mismo tiempo el Día de San Jorge, patrón de Cataluña, pero también de Aragón, por no hablar de otros territorios como Inglaterra, Portugal o Bulgaria. Por ello, aprovecho para hacer un llamamiento para que en el territorio nacional se pronuncie este día en español (San Jorge), no en catalán (Sant Jordi). En Cataluña que lo llamen como quieran. Están en su derecho y yo ahí no entro, pero en el resto de España refirámonos a este gran día en nuestro idioma, que no es otro que el español.

Tras esta petición, os dejo aquí unos vídeos de Oregón Televisión para celebrar el Día de San Jorge, sin antes mandar un mensaje con todo el cariño del mundo a los catalanes: al igual que los aragoneses sabemos reírnos de nosotros mismos, espero que ustedes no se tomen estos vídeos como una ofensa, sino por lo que son: una parodia en forma de humor. Lo digo sobre todo por si hay algún político despistado leyendo este blog.








El señor de los anillos

El mundo del deporte está de luto por la muerte de Juan Antonio Samaranch a la edad de 89 años por una insuficiencia cardiaca. No en vano, él es el padre del olimpismo moderno y de ahí su título de presidente de honor del Comité Olímpico Internacional, órgano que presidió durante 21 años, de 1980 a 2001, sólo superado por Pierre de Coubertain.

Cuando era joven, en los años cuarenta, perteneció al equipo de hockey sobre patines del Espanyol. También practicó el boxeo y el fútbol, pero a pesar de su espíritu de deportista, Samaranch prefirió permanecer en la sombra como dirigente. Varios fueron los cargos que ocupó hasta 1966, fecha en la que entró a formar parte del COI: fue presidente de la Federación Española de Patinaje, jefe de la delegación española en los Juegos Olímpicos de 1956, concejal de Deportes del Ayuntamiento de Barcelona y presidente del Comité Olímpico Español.

Ya en 1980 fue elegido presidente del COI justo antes de los Juegos Ólimpicos de Moscú. Desde que ocupó el cargo, sus objetivos se centraron en terminar de una vez por todas con el boicot político de los países capitalistas o comunistas, permitir la participación de deportistas profesionales y sacar de la bancarrota al movimiento olímpico a través del patrocinio. Logró todos ellos, creando el olimpismo moderno que conocemos en nuestros días.

Pero ahí no queda todo. Su sueño era que su país, España, y su ciudad, Barcelona, tuvieran la posibilidad de organizar unos Juegos. También lo logró. En 1992 España y Barcelona se abrieron al mundo y el resto del planeta se deshizo en elogios. Fueron los mejores Juegos hasta la fecha, sin boicots políticos y con profesionales como Jordan y su Dream Team.

Y encima la delegación española se sumó a la fiesta con 22 medallas, 13 de ellas de oro, nuestro mejor resultado hasta la fecha. Fue un antes y un después en el deporte español, ya que desde aquel verano nos hemos acostumbrado a ganar, cada vez más, cuando hasta ese momento el éxito de un deportista español era una isla en mitad de un océano.

En 2001 dejó la presidencia del COI, pasó a ser presidente de honor del movimiento olímpico y se erigió como bandera de las candidaturas de Madrid para 2012 y 2016. De hecho, el año pasado, durante la elección de los Juegos Olímpicos de 2016, emocionó al personal con las siguientes palabras: “Tengo 89 años, estoy al final de mi vida y os pido la concesión de los Juegos para mí país”. Sus palabras llevaron a Madrid hasta la final con Río, pero la posibilidad de que un país del tercer mundo acogiera por primera vez unos Juegos Olímpicos, tal y como representó el famoso mapa de Lula, pesó más que los deseos del señor de los anillos. Descanse en paz.

Sneijder y Diego Milito: sociedad Internazionale

El Inter de Milán dio ayer un gran paso hacia la final del Bernabéu tras ganar 3-1 al Barça en el partido de ida de las semifinales de la Champions. Y ello gracias al gran planteamiento de Mourinho, al partidazo en defensa de Zanetti, al gran muro de contención que forman Motta y Cambiasso en el centro del campo y, sobre todo, a la sociedad formada por Sneijder y Diego Milito.

En cuanto el Inter robaba, el balón iba a parar a las botas del holandés, quien, con su gran visión y toque, rápidamente habilitaba entre líneas al argentino, uno de los mejores a la hora de interpretar ese tipo de jugadas. De esta manera el conjunto italiano evitaba la presión del Barça en el centro del campo, le cogía la espalda a Alves y Maxwell, hacía que Puyol y Piqué tuvieran que correr hacia atrás, ganaba metros y creaba peligro. Todo ello con la misma jugada una y otra vez.

Así se entiende que Sneijder se convirtiera en el amo y señor del partido, coronando su estupenda actuación con un gol y una asistencia, y que su gran socio, Diego Milito, participara en todos los goles del Inter, dando el último pase en los dos primeros y marcando el tercero. Y a los dos les conocemos muy bien en España.

El Real Madrid cometió el grave error de dejar marchar a Sneijder por quince millones más objetivos y al Zaragoza no le quedó otra cosa que malvender hace dos veranos a Diego Milito al Genoa por doce kilos tras descender a Segunda. Lo triste fue que ningún grande se fijara en esa ganga, algo que quedó demostrado un año después cuando el Inter lo fichó por 22 millones. Ambos fueron infravalorados en su momento; ahora son ídolos en el Inter, club al que pueden conducir a la final de la Copa de Europa 38 años después.

Una vida en imágenes

El pasado domingo por la tarde estuve viendo fotos en el ordenador con Alberto, mi primo pequeño de cuatro años. De hecho, se trata de una de sus grandes aficiones y lo más curioso de todo es que siempre me pide que le enseñe fotos de Katy. Como sabéis muchos de vosotros, hace medio año mis padres y yo tuvimos que tomar la triste decisión de sacrificarla, aunque mi primo no sea consciente de ello y piense que se encuentra en Salou de vacaciones.

Fue uno de los momentos más duros de mi vida. Por un lado tratas de convencerte de que lo haces para que el animal no sufra, pero por otro tienes la sensación de que estás traicionando a un ser querido que te ha sido fiel durante trece años. Por aquel entonces el blog no estaba activo, así que aprovecho ahora para poner una selección de fotos de la que para mí ha sido la mejor perra del mundo.


Días de resaca y conversaciones post salida nocturna

Si he de ser sincero no sabía de qué escribir hasta que me ha venido a la cabeza una frase que hace dos semanas soltó un amigo mío cuando estábamos tirados en la playa: “Hacemos lo mismo que cuando teníamos 18 años, con la diferencia de que en aquella época en vez de estar muriéndonos de la resaca, estaríamos jugando un partido de fútbol y deseando que llegue la noche para liarla de nuevo, mucho más siendo la última noche. Ahora, en cambio, nos da pereza el hecho de pensar que aún tenemos que salir una noche más”.

La frase no deja de ser una realidad: me hago mayor, nos hacemos mayores. Recuerdo la época en la que podía jugar hasta dos partidos aunque hubiera salido la noche anterior. Ahora no me da ni para jugar uno. Y eso no es todo: me duele la cabeza con más facilidad, las lagunas son mayores, el malestar me dura todo el día y la pereza se me apodera hasta el punto de poder pasarme todo el día en mi cuarto en el mundo Tuenti, subiendo fotos, hablando por el chat o escribiendo comentarios bastante chorras.

Por suerte hay varias cosas que me impiden convertirme en un elemento decorativo más de mi cuarto: el trabajo, este blog, la jornada de Liga y las conversaciones post salida nocturna, que tienen como finalidad completar entre varios amigos las lagunas de lo que sucedió la noche anterior en la medida de los posible y revivir los mejores momentos para echarte unas risas.

Pero dichas conversaciones engloban otros aspectos secundarios, como las típicas promesas que sólo duran hasta el siguiente fin de semana. ¿Cuántas veces habré oído yo decir a algún amigo que ya no va a beber más? ¿Cuántas veces habré llegado a decir que no volvería a tomarme un chupito de tequila en la vida? Creo que no tengo dedos suficientes para contarlas.

Y ahí no acaba la cosa. Podemos encontrar al amigo que pide perdón al resto por lo que quisiera que hiciera la noche anterior cuando posiblemente ya pidió perdón mil veces sin acordarse de ello. También al que se arrepiente de algo que en su momento le pareció una gran idea y que en realidad fue una auténtica cagada (cuanto mal han hecho los mensajes de móvil a la vida nocturna). Y por último está el que se acuerda de todo y le hace recordar al resto cosas que realmente no quieren recordar.

Como se puede observar, el mundo de las resacas es más complejo de lo que parece, tanto, que hay mil formas de pasarlas. Además de estar todo el día delante del ordenador, uno puede echarse la siesta del siglo, ver una película de risas o tiros, dejarse caer en la cama mientras escucha música o Carrusel Deportivo, recurrir a las drogas en forma de aspirina o darse un bañito en la piscina en épocas veraniegas. Que cada uno elija la que más le guste y hasta el sábado que viene.

La doble alegría de un periodista

Anoche el CAI Zaragoza regresó a la ACB, un objetivo que estaba obligado a conseguir sí o sí por presupuesto, historia y plantilla. Eso no quita que sea un motivo de alegría para toda la afición, la ciudad y todo Aragón. Y he de reconocerlo, también para mí. En primer lugar por mi trabajo. A mí me toca seguir la actualidad de este equipo semana tras semana y creo que no hace falta decir que prefiero mil veces seguirla en la ACB que en la LEB, mucho más después de saborear las mieles de la máxima categoría la pasada temporada.

Las razones no sólo radican en el nivel de juego, con mejores equipos y mejores jugadores. También en la dinámica de trabajo: hacer la previa y la crónica de todas las jornadas de un equipo que está muy por encima del resto, agota. Es contar una y otra vez lo mismo, a veces con sólo tres días de diferencia. En cambio, en la ACB, sólo debo cubrir los partidos de casa gracias al resto de las delegaciones, que sí que tienen la obligación de ofrecer la máxima categoría a sus lectores, no como en la Adecco Oro. Además, el conocimiento y la información acerca del resto de equipos y sus jugadores es mucho mayor en la ACB, haciendo el trabajo de un servidor mucho más sencillo.

La cosa no queda ahí. No puedo decir que los jugadores del CAI sean amigos míos porque eso sería mentir, pero sí que existe una relación laboral, aunque ésta se reduzca a un par de entrevistas o reportajes y a las ruedas de prensa o presentaciones. A más de uno lo aprecio como jugador y profesional, además de haberme caído bien cuando he tratado con él. Siempre han sido muy correctos conmigo y por tanto yo me alegro mucho por ellos, en especial por Lescano, Quinteros y Phillip, que son los que más tiempo llevan en el club aragonés. Los tres decidieron quedarse tras el descenso y merecían que la ACB les diera una nueva oportunidad.

Además, este club me ha permitido vivir dos ascensos, un descenso y varias decepciones, pero posiblemente la experiencia más extraña tuvo lugar el domingo pasado. El CAI llegó a la estación del AVE justo cuando comenzaba el último cuarto del partido del Melilla. Si estos perdían, los aragoneses lograban el ascenso de forma matemática. Ante esta posibilidad, los jugadores, el cuerpo técnico, gente del club y los periodistas que estábamos ahí presentes nos encerramos en un cuarto para seguir los últimos minutos de aquel encuentro. Uno está acostumbrado a ver los éxitos y los fracasos de los deportistas desde la lejanía, aunque probablemente más cerca que el resto de la gente, pero el domingo estábamos en la misma habitación. Daba la sensación de que uno formaba parte de aquello. Puede que sea así o puede que no, pero lo que sí que es verdad es que esta experiencia y las anteriormente citadas me han servido para formarme como profesional. Y encima he tenido la suerte de hacerlo con el equipo de mi tierra, por lo que el ascenso supone una doble alegría: como aficionado y como periodista.

P.D.- En cuanto a la fiesta del ascenso... ¡Secreto de sumario!

Such Great Heights (The Postal Service)

Such Great Heights pertenece al primer y único álbum de estudio de The Postal Service, cuyo nombre es Give Up y fue lanzado en febrero de 2003. Este tema es considerado la canción más exitosa de este grupo estadounidense, un dúo formado por Jimmy Tamborello y Ben Gibbard.

Lo más curioso era su manera de trabajar. Dado que vivían a varios kilómetros de distancia, se mandaban la música por correo. De ahí que el nombre del grupo sea The Postal Sevice. El método de trabajo era el siguiente: Tamborello mandaba las bases electrónicas y Gibbard añadía la parte acústica, las melodías y la letra, un proceso que se repetía varias veces hasta que daban por válido el tema. Finalmente, el proyecto resultó ser más exitoso de lo esperado, con resultados tan brillantes como Such Great Heights.

Iniesta: ¿Un remake con final alternativo?

He de reconocer que me preocupa la lesión de Iniesta. No por lo que le pueda afectar al Barcelona, sino por el hecho de que el Mundial está a la vuelta de la esquina. No sé vosotros, pero a mí me da que esta película ya la he visto. La temporada pasada se lesionó frente al Villarreal en Liga, jugó la final de la Champions infiltrado y finalmente no pudo ir a la Copa Confederaciones.

Y me preocupa porque en esa competición se demostró la importancia que tiene Iniesta en el juego de la Selección, al igual que Silva, aunque este último en menor medida. Para mí hay tres jugadores que son insustituibles en el ataque de España: Xavi, Villa y el propio Iniesta. Es cierto que aún sin uno de ellos, como ocurrió en la final de la Eurocopa con la lesión del Guaje, tenemos capacidad, talento y calidad para ganar a cualquiera, pero el riesgo de tener un mal día aumenta. Eso, en un torneo en el que las eliminatorias se juegan a un solo partido, es un dato a tener en cuenta.

Realmente quiero pensar que estamos ante otra película y no ante un remake, y por ello me esfuerzo en pensar en las diferencias. El año pasado Iniesta no tuvo ni un mes para recuperarse antes de jugar la final contra el Manchester, una final que puede no disputar esta temporada el Barça si cae eliminado ante el Inter. Y si la juega, habrá que ver si el jugador manchego participa en ella tras pasarse un mes inactivo. Otro dato muy importantes es que nos encontramos ante un Mundial, no ante la Copa Confederaciones, y estoy seguro de que Iniesta hará todo lo posible para acudir a la cita de Sudáfrica y no atenderá a las presiones de su club. Es cierto que ha sufrido cuatro lesiones musculares en un año, pero no creo que haya un futbolista en todo el planeta que se quiera perder algo tan grande como un Mundial y mucho menos teniendo la posibilidad de proclamarse campeón.

¡Eh! Pues ahí va otro articulico, co

¿Os habéis dado cuenta de que cada vez que sale un aragonés en un informativo nacional siempre eligen al individuo con más acento del barrio o del pueblo? No es de extrañar que en el resto de España nos consideren unos catetos y piensen que en Aragón acentuamos todas las sílabas de todas las palabras. ¿Y nosotros qué hacemos al respecto? Pues tomárnoslo con muchismo humor, co, al igual que los muchachicos de Oregón Televisión.










Bazzinga

Joaquín fue el primero en hablarme de The Big Bang Theory. En unas de nuestras múltiples conversaciones vía Messenger me recomendó esta serie y me persuadió para que la viera sin falta. Así que al día siguiente confié en su criterio y me bajé los primeros capítulos.

Al principio la cosa no pintaba bien: frikis, frikis y mas frikis, y entre tanta frikada una chica guapa. Pero una vez que me metí de lleno en la serie descubrí lo divertida que era. Las frikadas pasaron a ser risas y más risas, entre otras cosas gracias a un ingeniero judío salido y a un indio con un extraño trastorno que le impide hablar con mujeres salvo que vaya ebrio.

Aunque el mejor personaje es el de Sheldon Cooper, interpretado por Jim Parsons. Se trata de un físico teórico superdotado, sabelotodo y extremadamente soberbio que no duda en hacérselo saber a sus amigos con gran menosprecio. También son bastante curiosas sus rarezas y manías, como tener un sitio propio en el sofá del salón y verse incapaz de sentarse en cualquier otro, su forma de llamar a la puerta y su famoso bazzinga cuando alguien cae en una de sus bromas. Tampoco logra pillar el sarcasmo, es fan de Spock, le cuesta relacionarse con la gente y su falta de empatía es alarmante. En definitiva, todo un personaje al que la gente debe conocer sin falta y si es en versión original, muchísimo mejor.

Series comentadas en el blog antiguo

Mil periodistas deportivos de aquí a la Plaza de España

No recuerdo ni sobre qué iba la conversación ni por qué me vino a la cabeza, pero estaba hablando con una amiga y de repente me acordé de una entrevista de trabajo que tuve hace algo más de tres años. No voy a decir de qué medio se trataba, pero la historia merece estar en este blog por surrealista.

Uno suele llegar a estas citas con varios minutos de antelación con la intención de aparentar ser una persona responsable y puntual. En esta ocasión eso fue un grave error. No me dieron ni las buenas tardes. Sólo se dignaron a recriminarme que había llegado cinco minutos antes y que ellos tenían una agenda muy apretada. Por supuesto, me hicieron esperar en la calle hasta la hora de la entrevista.

Una vez dentro del despacho del director tuvo lugar la siguiente conversación:

-Buenas tardes. Pase y siéntese.
-Buenas tardes.
-Su nombre es Javier Marín, ¿verdad? Estoy viendo en su currículum que en la foto sale más delgado…
-(...)
-Hemos tenido el detalle de recibirle, ya que a nosotros nos gusta dar oportunidades a los jóvenes a pesar de que no tengan ningún tipo de experiencia, como usted (había estado un verano en El Periódico de Aragón y otro en el AS, pero al parecer esperaban que alguien que acababa de terminar la carrera tuviera ya una larguísima trayectoria profesional). ¿Qué le gustaría hacer aquí?
-Hasta ahora siempre he trabajado en deportes, que es lo que más me gusta.
-Deportes, deportes… Si quiero un periodista deportivo, de aquí a la Plaza de España encuentro mil. Veré qué se puede hacer si al final le seleccionamos, pero eso prácticamente no es periodismo. ¿Con quién trabajaba en el AS?
-Con Pedro Luis Ferrer, Mario Ornat…
-Ni les conozco (puede que sean los dos mejores periodistas deportivos de Zaragoza, pero este señor, director de un medio de comunicación, desconocía su existencia). Mire, somos tan generosos que le vamos a dar un cursillo que cuesta bastante dinero sin la seguridad de que al final le vayamos a contratar. Sólo por eso ya tendría que estar agradecido. Y le voy a ser sincero, no espero nada de usted. Vuelva mañana a las ocho de la tarde. Buenas tardes.
-Muchas gracias y buenas tardes.

Por supuesto, al día siguiente regresé a las ocho en punto, ni un minuto antes ni un minuto después, para que me impartieran ese curso tan caro. Éste consistía en enseñarnos los tres programas que utilizaban en ese medio, dos de los cuales yo ya sabía utilizar. El curso lo hice con otras dos chicas y me dio la impresión de que malgasté dos horas de mi vida: cosas que a mí me costaba cinco minutos hacerlas, ellas se tiraban media hora; no aprendí nada nuevo, ya que el programa que yo desconocía lo hubiera sabido utilizar hasta un niño de tres años; y encima las dos chicas eran bastante sosas.

Al día siguiente tuve que volver para hacer una prueba y estaba claro que si tenían que escoger a uno de los tres, yo iba a ser el elegido. Al final me contrataron a mí y a otra de las chicas, y aunque parezca sorprendente me ubicaron en deportes. Para no esperar nada de mí, algo debí hacer bien, ya que al mes me facilitaron un equipo de trabajo propio, siendo el único colaborador que contaba con esta ventaja. Pocos días después, el periodista que tenía la plaza de fijo en deportes se marchó y me la ofrecieron a mí.

La rechacé porque un par de semanas antes me habían llamado del AS para ofrecerme un puesto de colaborador, lo cual estaba muy bien porque podía compaginar ambos trabajos. Si hubiera aceptado quedarme como fijo, no habría podido continuar en el AS y eso ni se me pasaba por la cabeza, mucho más cuando mis compañeros habían luchado durante varios meses para que en Madrid dieran el visto bueno a tenerme como colaborador.

A los tres días de rechazar la oferta recibí una llamada muy sospechosa en la que me pedían que llevara el equipo a la redacción para una revisión técnica. Lo llevé y ésa fue la última llamada que recibí de aquel medio, ya que optaron por marginarme en vez de decirme claramente que ya no querían contar conmigo por haber rechazado el puesto de fijo. Fallaron las formas al principio y, como no podía ser de otra forma, fallaron las formas al final.

A Messi sólo lo puede frenar un aragonés

Llegó el día del clásico. España entera se paralizará esta noche para presenciar un Real Madrid-Barcelona que puede decidir la Liga más bipolar de la historia. Nunca antes dos equipos habían mostrado tanta superioridad sobre el resto, cada uno con su estilo y sus estrellas: Higuaín, Xavi, Cristiano, Iniesta, Casillas… y sobre todo Messi.

El argentino llega al partido del siglo de cada temporada tras meterle cuatro peras al Arsenal en los cuartos de final de la Champions. Ahí es nada. Pero es que también le hizo tres al Zaragoza y al Valencia, dos al Sttutgart y al Almería, y uno a no sé cuántos equipos más. Así hasta sumar 26 en Liga y ocho en Europa. Nunca me cansaré de decir que ahí es nada.

Ello implica que todos los focos se centren en él pero también en su marcador. En el AS publicaron hace unos días que esa misión iba a recaer sobre Arbeloa, al que ya han bautizado como el plan anti Messi. El internacional español, que además de buen futbolista es inteligente y tiene mucho sentido común, contestó que “no hay un jugador capaz de parar por sí solo al argentino”.

Estoy de acuerdo. A Messi sólo hay una forma de frenarle: encimarle, no dejarle recibir el balón y si lo hace intentar que no se dé la vuelta, ser duro y sobre todo contar con ayudas, ayudas y más ayudas de tus compañeros. Puede que la responsabilidad recaiga sobre Arbeloa o cualquier otro, pero el éxito o el fracaso dependerá del trabajo defensivo de todo el equipo. Y ahí puede estar la clave de este partido.

Pero como la responsabilidad principal tiene que recaer sobre alguien, la opción de Arbeloa es la que más me gusta. Puede que Ramos o Albiol sean mejores, pero el aragonés tiene más cabeza y sabe leer mucho mejor los partidos, algo fundamental en la noche de hoy. Y sí, he dicho aragonés y también podría haberme referido a él como canterano del Real Zaragoza, ya que aunque nació en Salamanca, se crió a orillas del Ebro y el hecho de que haya jugado con la selección aragonesa así lo demuestra, tal y como se puede ver en la foto de abajo (se encuentra en la fila de abajo entre otros dos fenómenos como Cani y Longás).

Por tanto, si al final Arbeloa es el elegido (supongo que todo dependerá de en qué zona juegue Messi), el madridismo puede estar tranquilo y confiar en él, ya que en mejores manos no se puede estar. Alguien que ha sufrido durante gran parte de su vida algo tan molesto como el cierzo, ¿por qué no va a ser capaz de frenar a una Pulga? Para un aragonés eso es pan comido.

Mr. Brightside (The Killers)

Celos: sospecha, inquietud y recelo de que la persona amada haya mudado o mude su cariño, poniéndolo en otra. De eso va precisamente este tamazo de The Killers. Mr. Brightside pertenece a su álbum debut Hot Fuss y fue escrita por Dave Keuning (guitarrista) y Brandon Flowers (vocalista), quien reconoció que la letra corresponde a una historia real, basándose en las insoportables emociones que sintió cuando se enteró de que su novia le engañaba con otro.

Mr. Brightside significa literalmente ‘lado brillante’, pero la traducción más acertada sería Sr. Optimista. De hecho, Brandon Flowers señaló que el tema se titula así porque él se considera un optimista y siempre intenta ver el lado positivo de las cosas. Lo que sí es seguro es que ésta es una de las canciones más exitosas y conocidas de The Killers, llegando a alcanzar en 2004 el puesto número diez en la listas de Estados Unidos y el Reino Unido.

Podemos encontrar dos versiones del videoclip de Mr. Brightside: la europea, en blanco y negro y en la que se nos muestra a la banda interpretando el tema, y la americana, mucho más comercial, con vestuario y escenografía de los años veinte e interpretada por Eric Roberts, nominado al Oscar en 1985 por El tren del infierno. Paul Anka hizo una versión jazz de esta canción en 2007.


Canciones comentadas en el blog antiguo

Arte desde los once metros

El fútbol es tan increíblemente imprevisible que deja detalles sorprendentes incluso desde los once metros. Algo que parece tan sencillo como disparar a un lado u otro de la portería se convirtió en un ejercicio de originalidad de la noche a la mañana. Hablo de Antonín Panenka y su famoso penalti. Era el año 1976 y Checoslovaquia y la República Federal de Alemania se enfrentaban en la final de la Eurocopa en Belgrado. Los germanos eran favoritos por la calidad de sus jugadores (Beckenbauer, Maier, Vogts, Hoeness o Müller) y por su condición de campeones del mundo y de Europa, pero no pudieron pasar del empate a dos tras los noventa minutos reglamentarios y la prórroga.

Los once metros iban a decidir el ganador. La tensión se palpaba en la grada y en el césped. Los siete primeros penaltis acabaron en gol, pero Hoeness erró en el octavo. Turno para Panenka. En sus botas tenía la responsabilidad de todo un país que se encontraba a once metros de lograr su primera Eurocopa. ¿Pero quién dijo miedo? Panenka cogió bastante carrerilla y cuando todo el mundo pensaba que iba a soltar un tremendo cañonazo, picó el balón hacia el centro de la portería. Maier, impotente y ya en el suelo, sólo pudo observar como la pelota entraba lentamente al fondo de las mallas. Checoslovaquia alcanzó la gloria y Panenka, sin ser consciente de ello, iba a pasar a la historia del fútbol.

Desde entonces le han salido miles de imitadores. Posiblemente el que más se le parezca, tanto por la belleza como por el momento, sea el de Zidane en la final del Mundial de 2006 frente a Italia, pero esa historia no tuvo final feliz. Algo así debió pensar Totti cuando hizo literalmente el ridículo al tratar de marcar un gol de este estilo. El portero, que no se lanzó a ninguno de los dos palos, sólo tuvo que esperar a que el balón le llegara a las manos mientras se tomaba un café. Quizás el penalti hubiera tenido otro desenlace si el italiano hubiera optado por tirarlo de tacón, tal y como hizo en un entrenamiento.

Otro que quiso innovar y lo logró fue Johan Cruyff. En 1982, con el Ajax, se disponía a lanzar una pena máxima. Colocó el balón en el punto de penalti y cuando parecía que iba a empezar a tomar carrerilla, dio un pase prácticamente horizontal a un compañero. Este último se acercó a la portería y cuando le salió el guardameta se la devolvió a Cruyff para que marcara a puerta vacía. Pires intentó imitarlo con el Arsenal, pero le salió el tiro por la culata.

Hay otra serie de penaltis de gran belleza, como tirarlo a pie parado, de rabona o de paradinha, aunque a este último le está haciendo un flaco favor Neymar, delantero del Santos. Lo suyo no deja de ser una trampa y así se explica en el reglamento; otra cosa es lo que quieran consentir los brasileños. Y para paradinhas, la que se marcó el otro día Djalminha en un encuentro de veteranos. No fue gol, pero se agradece esa originalidad en forma de pirueta tipo ballet. Arte en estado puro. Arte desde los once metros.








La voz de todos los niños



Me encanta este vídeo. En primer lugar por la inesperada, sorprendente y divertida respuesta de esta niña. Y precisamente nos hace gracia porque lo dice una niña y no un tipo encapuchado con una metralleta en la mano. Es decir, lo hace la voz de la ingenuidad y la inocencia, en una edad en la que se desconoce la muerte, las tragedias, el terror o los horrores que puede llegar a cometer el hombre. En una época en la que todo son juegos y se desconoce la palabra víctima.

Y por ello también me identifico de alguna manera con esta niña. ¿Quién no ha deseado alguna vez algo parecido a esa edad para no tener que ir al colegio? Y ya puestos, una vez que somos adultos, sin llegar al extremo de una bomba porque somos conscientes de las posibles consecuencias, ¿quién no ha deseado que haya un apagón en el trabajo para tener el día libre? Sólo espero y deseo que los padres de esta niña no la castiguen, ya que al fin y al cabo lo único que hizo fue expresar en voz alta un inocente e ingenuo pensamiento que muchos hemos tenido a su edad. Sin saberlo, esta niña se convirtió en menos de veinte segundos en la voz de todos los niños.

Don't Stop

Vaya semanita. Stop. Celebro mi cumple. Stop. Antes tengo partido. Stop. Al final Joaquín e Íñigo no pueden venir. Stop. Llego al pabellón. Stop. Me encuentro a Joaquín y Borja en la grada con una litrona. Stop. Visita sorpresa. Stop. También vienen a vernos Eloy, que estaba lesionado, Alex, Sergio y Luis. Stop. Ridículo. Stop. Perdemos el partido. Stop. Borja y yo vamos a comprar la bebida para la celebración. Stop. Nos invitan a probar una nueva bebida tipo Aquarius. Stop. La chica que lo promociona mira nuestra cesta y recalca que viene bien para la resaca. Stop. Preparamos la cocina de mi abuela. Stop. Empieza a llegar la gente. Stop. Bebemos. Stop. Rivas tira una copa. Stop Seguimos bebiendo. Stop. Luisete promete no romper nada. Stop. Beita, Marina y las señoritas García, María y Bea, me regalan dos camisetas. Stop. Muchas gracias. Stop. Hora de marcharse. Stop. Invito a una copa a Óscar, Sergio, Felipe y Juanan en el Inblue. Stop. Vamos a la Daluxe. Stop. Menudo grupo. Stop. Pedimos copas. Stop. Aparece mi prima Mavi. Stop. Más copas. Stop. La camarera flipa. Stop. Nos vamos a almorzar. Stop. Gran resaca. Stop. Toca trabajar. Stop. Me dan la gran noticia de que tengo fiesta en el puente. Stop. Me puedo ir a Salou. Stop. Me corto el pelo. Stop. Trabajo tres días. Stop. Entrevisto a Uche. Stop. Cojo el AVE. Stop. Cinco en un C3. Stop. Joaquín tiene calor. Stop. Recordamos mi cumpleaños. Stop. Bebemos en casa de Borja. Stop. Guille me presenta a Bea. Stop. Reflexiones futbolísticas. Stop. Me entero de que Nacho es Moncho. Stop. Edu es un cabrón. Stop. Vamos al Nikita. Stop. Aparece Bea Farto con su amiga Leticia. Stop. La gente empieza a emigrar al Kalea. Stop. Sorpresa: Guille no es de los primeros en irse. Stop. Teresa se marea y se cae al suelo. Stop. Pobres a la izquierda, pobres a la derecha. Stop. Teresa vuelve a besar el suelo. Stop. No hay dos sin tres. Stop. Turno para un vaso. Stop. No fue el último. Stop. Diferencias entre estar mareada y borracha. Stop. Regresamos a casa. Stop. Pollo Maya. Stop. Primer contacto con el Pro. Stop. Joaquín tiene calor. Stop. Aparece Laura. Stop. Alberto se marcha a Zaragoza. Stop. Partido de fútbol en la playa. Stop. Amago de infarto. Stop. Baño de algunos. Stop. Turno para comprar los billetes de vuelta. Stop. El voley nos espera. Stop. Alen y Edu lideran a sus equipos. Stop. El cadáver de Álvaro vigila las toallas. Stop. Hora de comprar provisiones para la noche. Stop. Las pechugas tienen buena pinta. Stop. Difícil elección entre el Bacardi Mohito y el Bacardi Limón. Stop. Pizza y Pro. Stop. María me enseña su pulsera-sonajero. Stop. Joaquín tiene calor. Stop. Me cargan las copas a escondidas. Stop. Edu nos muestra su talento con una batería manual. Stop. Me entero de que no soy un hombre de verdad porque no he hecho la mili. Stop. Me someten a una especie de mili. Stop. Tiramos a Joaquín. Stop. Chupito mortal de tequila. Stop. Laura y yo hablamos. Stop. Más chupitos. Stop. Pequeña laguna mental. Stop. Reflexiones sobre amores platónicos. Stop. Acompaño a Laura, María y Teresa. Stop. Me he dejado la chaqueta en el Kalea. Stop. Les roban el abrigo a Herni y Edu. Stop. Laura me cuenta chistes. Stop. No es su fuerte. Stop. Llega Edu con mi chaqueta. Stop. Toca dormir. Stop. Me despierto mucho antes de lo que me gustaría. Stop. Todos duermen y nadie me coge el móvil. Stop. Nacho y Joaquín amanecen. Stop. Realizo la triquiñuela más sucia de la historia del Pro. Stop. Fue sin querer. Stop. Vamos a por unas hamburguesas. Stop. Llamo a Alberto. Stop. Las hamburguesas pueden con nosotros. Stop. Joaquín tiene calor. Stop. Bajamos a la playa. Stop. Menudo frío. Stop. Me voy a ver el partido del Zaragoza. Stop. Herni y Borja ven la primera parte conmigo. Stop. Importantísima victoria. Stop. Sensación de alivio y alegría; estamos muy cerca de salvarnos. Stop. Álvaro, Borja y yo jugamos a la pocha. Stop. Herni y Borja me regalan unas croquetas. Stop. Estaban bastante buenas. Stop. Joaquín pone una música que sólo le gusta a Bea. Stop. Joaquín tiene calor. Stop. Jugamos a la seta. Stop. Nacho es el señor del pulgar. Stop. Pablo Marmol presenta Salou. Stop. Ferrari. Stop. Radar. Stop. Borja y Alen se ponen a jugar a la Xbox. Stop. Pablo Marmol presenta series de dibujos animados como…. Verano Azul. Stop. Andrés se confirma como un grande. Stop. Jugamos a la pirámide. Stop. Saco la cámara. Stop. Leticia hace el baile de la tetera. Stop. Me pongo el sombrero de conversar y empiezo a contar batallitas pasadas. Stop. Leticia y María me dicen q les agregue al Tuenti. Stop. Quieren crear un club de fans mío en el Facebook. Stop. María no quiere apostar conmigo. Stop. Habría ganado yo. Stop. Sesión de fotos. Stop. Bea apura las últimas gotas de vino de los cartones. Stop. Emigramos de casa de Borja pero sin él. Stop. Hoy toca Emporio. Stop. Me rallo. Stop. Le digo a Guille que me voy al Kalea. Stop. Jarra de cerveza. Stop. Vienen todos. Stop. Muchas fotos. Stop. Cierran el Kalea. Stop. Hamburguesas XXL. Stop. Teresa echa de una mesa a unos pobres muchachos. Stop. El tiempo nos impide ir a la playa. Stop. Recojo el apartamento. Stop. Quedo a tomar algo con Laura. Stop. Le cuento la noche. Stop. Voy a comer con Nacho y Joaquín al puerto. Stop. Está cerrado. Stop. Vamos al italiano de siempre. Stop. Nos ofrecen un chupito. Stop. Nuestro hígado dice que no. Stop. Voy a casa de Borja a buscar el Pro. Stop. Herni se pide una pizza del tamaño de una rueda de un camión. Stop. Le doy el DVD de las fotos a Edu. Stop. Nacho y yo nos montamos en el bus. Stop. Han pasado sólo veinte minutos y parece que hayan sido seis horas. Stop. Prometo que nunca más volveré a viajar en bus. Stop. Llegamos a Zaragoza. Stop. Me meto en el Tuenti. Stop. Agrego como amigas a María, Teresa, Bea y Leticia. Stop. Me reafirmo en el hecho de que le habría ganado la apuesta a María. Stop. Empiezo a subir fotos. Stop. Escribo a Mavi, Natalia y Dani para ver cómo les ha ido por Salamanca y Roma. Stop. Creo el evento del entrenamiento de los lunes. Stop. Llegan los madrileños a la capital. Stop. Primeras quejas sobre las fotos. Stop. Mortal. Stop. Entre foto y foto llego a la conclusión de que tengo que retomar este blog. Stop. Me pongo a escribir estas líneas para inaugurarlo de nuevo. Stop. Tengo puesto el sombrero de escribir. Stop. Unas pocas líneas se convierten en una parrafada. Stop. Lo siento. Stop. Tengo sueño y estoy muy cansado. Stop. Me voy a dormir. Stop. To be continued…

Bienvenidos

Dado que McDonald's se permite el lujo de inspirarse en un anuncio pasado de Coca-Cola, yo no voy a ser menos: a los habituales de este blog, a los que lo descubren ahora, a los que son mis amigos, a los que no conozco, a los que les gusta, a los que comentan, a los que entran por las encuestas, a los que les interesan las listas, a los que sólo se fijan en los títulos, a los que se leen todo, a los que discrepan, a los que están de acuerdo, a los que han entrado por error, a los que tienen a LaCosaNostra en favoritos, a los que son protagonistas de los artículos, a los que ni siquiera nombro, a los que les gusta el nuevo diseño, a los que se hacen un lío con el cambio de dirección, a los que les entra el sueño cuando me leen, a los que se meten porque no tienen otra cosa mejor que hacer, a los que están trabajando, a los que están en su día libre, a todos ellos... ¡¡Bienvenidos!!