Cuando los sentimientos hablan

El sábado pasado, en los instantes finales del partido entre el Real Zaragoza y el Barcelona, con 1-4 en el marcador, viví uno de los momentos más emocionantes en La Romareda: toda la afición, en una misma voz, cantando el ¡¡Alé Zaragoza, alé alé!!, el himno y el ¡¡Sí se puede!! Son ya 17 años como abonado y jamás había visto algo parecido en una situación tan crítica y siendo goleados. Si algo bueno han tenido los años de Agapito, es que el zaragocismo ha madurado de tal manera que uno tiene la más firme convicción de que volveremos a ser lo que éramos e incluso más grandes. El comportamiento de las dos últimas temporadas, quizás alguna más, está siendo ejemplar, siempre exhibiendo allá adonde vayamos nuestro orgullo de ser zaragocistas. Y tomando la frase inicial de uno de los vídeos que vienen a continuación, cuando los sentimientos hablan, sólo queda escuchar.



No hay comentarios:

Publicar un comentario